El dicharachero

Desde que es el reportero más dicharachero de Barrio Sésamo (léase cadena ser), Pablo Iglesias cree que Ayuso liderará el bloque reaccionario y el PP tras arrodillarse Casado. Creo que para saber eso, no hace falta ser ningún reportero, y menos ser un dicharachero, cuando has sido líder de un partido el cual se está hundiendo cada vez más en sus miserias, ya que al mentir tanto, los ciudadanos se están dando cuenta de quién ha sido, es y será Pablo Iglesias. Un tipo que llegó a la política para regenerarlo absolutamente todo, y que sólo se ha regenerado él, llegando a ser un personaje con dinero, propiedades y guardaespaldas pagados por todos los españoles. “No pensé que 3 días de presión mediática e interna arrodillaran a Casado. Aunque todos sean corruptos (a la derecha eso no le resta) Ayuso no sólo liderará el bloque reaccionario (derecha y ultraderecha) sino también el PP. El hispanotrumpismo ni siquiera necesitará otro partido”, es lo que ha colocado este reportero dicharachero en sus redes sociales, ya que todos estos cantamañanas y cortabolsas (lo mismo que los de enfrente), se mueven a base de tuiteos en vez de salir a dar la cara y hacerlo en ruedas de prensa como dios manda, como las de antes. Pero no, Twitter se ha convertido en su medio propagandístico, un lugar donde vale todo (o casi), el lugar perfecto para abrir la boca, criticar al ajeno y poco más. Como sabe el reportero más dicharachero, hablar en muy fácil, pero dar trigo es más complicado, de ahí que pusiera pies en polvorosa, viendo como todas sus promesas, las que prometió en el 15M, luego en campaña electoral y luego gobernando, no han llegado donde él quería, y eso debe de ser frustrante para un tipo que venía junto con toda su chusma (hijos de papá, amigos que no pagan las cuotas a la seguridad social, amigos que cobran de un país que tiene a sus gente en la miseria y que no declaran, etc, etc) a cambiarlo todo de golpe, a regenerar a base de talonario (con el dinero de otros, ojo al matiz) todo lo que ellos creían que no era bueno para su corto entender de lo que era España. Todo lo contrario a eso, es fascismo y ultraderecha, que son las dos palabras preferidas cuando no se tienen argumentos de peso para rebatir lo que tienes enfrente. Lamentable, penoso, perjudicial, costoso….todo eso ha sido y es el argumentario ideológico de este reportero dicharachero que hemos tenido la mala suerte de tener como vicepresidente de esta España gobernada por ruines, perroflautas y cortabolsas de lo más variopinto. Gobernantes que sólo saben apretar a la clase media, ya que es la que está controlada por nóminas y por tasas de autónomos, con subidas de todo tipo de impuestos, porque hay muchos chiringuitos que mantener, asociaciones feministas, asociaciones afines, sindicatos (no se rían por dios, en España todavía existen estos parásitos sociales aunque ustedes no los vean ni por error televisivo), mientras los gobernantes, incluido este reportero dicharachero, cobra su pensión política sin ningún pudor y encima habla sin tener la más remota idea de casi nada y etiquetando de ultraderecha a todo lo que no piense como él. La nueva política, la regeneradora, decían. España, año 2022. Mientras aquí estoy, viendo pasar la vida.

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