jueves, 20 de septiembre de 2018

Se lío la marimorena

España es una caja de sorpresas gracias al gobierno que tenemos la mala suerte de tener y de mantener con nuestros impuestos, que eso es lo peor de todo. Un gobierno que parece una veleta según los aires que les soplan sus socios de gobierno, y claro, así nos va. La última metedura de pata del gobierno, ha sido los de las 400 bombas guiadas por láser, que como sabrán ustedes paralizó por ese espíritu progre de pacifistas y de verdes con las que el gobierno se las quiere dar ante la opinión pública. Lo que no se esperaba el gobierno fue el golpe de mano que dio el gobierno de Arabia Saudí al respecto, que no fue otro que atar a ese contrato de las bombas, la construcción de las fragatas en los astilleros españoles. Y claro, se lío la marimorena. No tardaron los trabajadores de Navantia en salir a la calle en protesta por esta nueva gilipollez del gobierno español y de sus socios en el gobierno. Lo que los trabajadores de estos astilleros deberían de haberse dado cuenta, es que desde Moncloa las cosas no se ven de la misma manera, ni por supuesto desde el ala número 7, delante de una televisión de plasma de 45” de un casoplón en la cual vive un dirigente muy de izquierdas el cual ni se ha preocupado de nada con respecto a este tema, lo mismo que el comunista de IU que tampoco ha aparecido para nada. Pero eso harina de otro costal. Como digo, no tardaron los trabajadores en salir a la calle a luchar por lo que es suyo, que es su trabajo. Los cambios de dirección del gobierno son preocupantes, y más cuando afecta a miles de trabajadores honrados que sólo quieren trabajar, salir adelante y pagar los impuestos que luego nuestro gobierno incompetente utiliza en su provecho y lo que queda en beneficio de todos los españoles. ¿Qué ha tocado ahora?, pues ir a Arabia Saudí, y chuparle a los árabes lo que ellos hayan querido y cuántas veces hayan querido, con lo que la titular de Defensa tuvo que rectificar en el Senado que la operación estaba aún en estudio, aunque esos contratos estuvieran cerrados ya por el gobierno anterior, y que no dejaría en la estacada a los trabajadores de Navantia. La suspensión anunciada y ahora rectificada ponía en peligro el contrato con la naviera española para construir cinco corbetas por valor de 1.800M de € y con él 6.000 empleos en Cádiz. La rectificación de Defensa permitirá enviar las armas actualmente en un hangar de la Base Aérea de Zaragoza a la aviación militar saudí. Una marcha atrás que permite reanudar las tradicionalmente buenas relaciones comerciales con las autoridades del golfo Pérsico tras un amago de ruptura que ha llevado incluso a una delegación del gobierno a viajar a Riad para asegurar el contrato para sus astilleros en Cádiz. Es lo que tenemos, un gobierno sometido a sus socios, y que pone en peligro puestos de trabajo sin pensar en las consecuencias. La que nos espera con este gobierno veleta. La mare de deu nano. Mientras aquí estoy, viendo pasar la vida. 

Compártelo:

Bookmark and Share

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentame que te parece