martes, 18 de septiembre de 2018

Leyes anticuadas

Que en el S.XXI haya todavía delitos por atacar los sentimientos religiosos, dice mucho del país en el que estamos viviendo. Pero por otra parte, según nuestros políticos y algunos más, la ley es igual para todos, aunque luego la realidad sea otra bien distinta, como estamos acostumbrados a ver todos los días por la televisión o a leer en cualquier periódico de tirada nacional que se precie. Todo esto viene a colación, porque la semana pasada, detuvieron a ese personaje que antes era actor y que ahora es un activista de no se sabe qué, como tampoco se sabe de lo que vive. Pero ese es su problema y el da la Agencia Tributaria. Este personaje es Willy Toledo, que como saben ustedes fue detenido la semana pasada por la policía en ejecución de la orden dictada contra él por el Juzgado de Instrucción número 11 de Madrid por no acudir a declarar en dos ocasiones por una denuncia por supuesta vejación de los sentimientos religiosos. Se puede estar de acuerdo con la ley o no, pero hay cosas que no se pueden evitar y que hay que hacer, guste o no guste. La detención ha tenido lugar antes de un acto organizado en el teatro Barrio por él mismo. El actor fue llevado ante el juez para declarar. El lunes de la semana pasada, Willy Toledo señaló en un mensaje en su perfil de Facebook que llevaría su acto de desobediencia hasta las últimas consecuencias y que esperaría pacíficamente a los agentes de seguridad del Estado sin entregarse. Estaré toda la noche en el Teatro esperando a que vengan ustedes a detenerme. Por supuesto, ni yo, ni las compañeras asistentes al acto opondremos la más mínima resistencia a la detención, escribió en ese mensaje este actor o lo que sea ahora. Bajo mi punto de vista, Willy Toledo no hizo bien en no presentarse ante el juez, porque la ley es la que es, y el juez sólo cumple con su obligación, que es hacerla cumplir. Puede gustar o no, pero es lo que hay. Por lo que debería de luchar esta activista actor o lo que sea Willy, es pelear pacíficamente para que esa ley cambie, y por supuesto hacerlo con todas sus fuerzas. No le tengo mucho aprecio a este personaje, pero cuando las causas con justas, pues hay que apoyarlas hasta el final, siempre y cuando esté dentro de la legalidad vigente. El fallo de este personaje, ha sido ese, saltarse la ley actual. Pero seguramente sea algo calculado por este tipo, ya que esa actuación le va a dar alas a todos los activistas para hacer lo que les venga en gana sin que les pase nada, y ese es el peligro que ya está empezando a detectar, que se incumple la ley y la percepción es que la justicia no hace o no puede hacer nada por falta de recursos o por ganas. Un personaje público como este tipo, debe de dar un poco de ejemplo, pero si salta la ley como sino no, el ejemplo está dado y siempre habrá gente que le siga y le aplauda en cualquier decisión que tome. Pero en fin, esto es España y esto es lo que hay, Maikel Naig. Mientras aquí estoy, viendo pasar la vida. 

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