jueves, 11 de abril de 2019

Cum fraude (2ª parte)

Lo prometido queridos blogueros es deuda, y hoy en este blog pecador, continúo con el post de ayer, tal y como os dije que continuaría. Les hablaba de los datos que hay sobre ciertos temas de la economía española y como el uso o manipulación de los mismos, dan como resultado diferentes puntos de vista y se llega a diferentes conclusiones. En esta querida España en la que vivimos, no hay Churchill alguno, pues no tenemos gobernantes ni nada que se le parezca, sino que tenemos politicuchos de pacotilla, que ni siquiera saben esturrear mierda con una pala, o más bien politicastros, castuza, gentuza en definitiva que sólo piensa en solucionarse sus habichuelas, y muchas veces los políticos que tenemos en este país, a menudo no están muy lejos de la pista de un circo, y ya saben el que venga detrás, ¡que se joda! Así se comportó el impasible Rajoy, fumando puros y leyendo la prensa deportiva, mientras la seguridad social se encaminaba hacia el abismo, sin hacer absolutamente nada… Pero lo de ZPedro todavía es peor, y es que el capitán (en su caso, escasamente llega a grumete), que abre vías de agua en el barco, ampliando la cobertura, con fines electorales, a los desempleados de más de 52 años, por ejemplo, concediendo ayudas a troche y moche, realizando subidas totalmente inasumibles por el sistema, que hace aguas por todas partes, repito, y diciendo que va a revalorizar las pensiones igual que el IPC. ¿Y por qué no dos puntos por encima del IPC…? Al fin y al cabo, son más de diez millones de votos, repito, más sus respectivas esposas o maridos, en su caso. Posiblemente, más de quince millones de votos, y eso queridos blogueros son muchos votos. Y el que venga detrás, que arree. ¡El único problema es que los burros a los que habrá que arrear, será a sus votantes! Nadie serio, honrado y decente hace promesas que sabe que no puede cumplir, salvo que sea tonto del todo, o un auténtico engañabobos, como puede ser el caso de ZPedro o de cualquier politicucho de pacotilla que tenemos la mala suerte de tener y de mantener. Pero es lo que no has tocado, y es lo que hay Maikel Naig, unas personas que no tienen ni idea de nada, excepto de mejorarse su nivel de vida, y que sólo saben prometer cosas que no van a cumplir, y que sólo saben estrujar a sus ciudadanos para intentar cumplir y unas promesas inalcanzables y en muchos casos absurdas. Para eso son nuestros políticos, gentuza de la peor calaña que pueda existir sobre la faz de la tierra. Estoy muy harto de ellos, de todos ellos, viendo como mi nómina no llega al tercer día de existencia en cuanto me la ingresan por lo que ellos han provocado. Pero votes o no votes, seguirán jodiéndonos la vida lo mismo, porque para eso están. En fin, mierda de gobernantes. Mientras aquí estoy, viendo pasar la vida. 

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