Surgen tensiones

Qué tiempos aquellos en que los izquierdistas radicales se llevaban bien. Que tiempos cuando compartían todo, hasta los insultos al gobierno. Pero como pasa en la vida, todo tiene un fin. Pero antes de ese fin, suele haber tiranteces, tensiones por ver la misma cosa de diferente manera, y eso es lo que está pasando entre Rufián y Pablo Iglesias. Pero les cuento la película. Como saben ustedes voy a desayunar todos los días al bar de mi amigo Pacorro. Se lo pueden tomar como una chulería por mi parte como otra cualquiera. Cuando llego, Pacorro ya tiene la prensa diaria y el wifi a toda mecha, para que los parroquianos y los que no lo son, puedan informarse de lo que quieran y si quieren. Pues bien, en uno de esos periódicos de tirada nacional, me encontré con esta noticia que decía así: “LOS PRESUPUESTOS TENSAN LA RELACIÓN ENTRE RUFIÁN Y PODEMOS”. Vaya que interesante, fue lo primero que pensé. El diputado de ERC ha pasado de elogiar a los compañeros Iglesias y Domenech, a denunciar chantajes e insultos de un partido que se ha domesticado. En este último punto no le falta razón al diputado Rufián, ya que Podemos o mejor dicho sus dirigentes más visibles, se ha convertido en casta de un día para otro. El idilio ha concluido y parece que la dinamita, que no solo ha roto las relaciones, sino que las ha tensado ha sido la negociación por los Presupuestos acordados entre PSOE y Podemos. Rufián interpeló en varias ocasiones a los morados. Durante una de las últimas sesiones de control al Gobierno, el diputado de ERC denunció que no solo tenemos que aguantar la represión de este Estado sino también los chantajes del Gobierno y de alguna formación política que de facto son sus socios. No hace falta ser político ni siquiera un analfabeto como ellos, para darse cuenta que Rufián estaba haciendo referencia a Podemos. Y es que, los morados han centrado sus esfuerzos y situar el foco sobre ERC. Cabe recordar que Pablo Iglesias visitó en prisión a Oriol Junqueras y, tras la negativa del partido a votar los PGE si el Gobierno no hacía un gesto relacionado con el juicio del procés (que a fin de cuentas el problema de fondo de esta ruptura o tensión entre ambas formaciones), los morados iniciaron una ofensiva que incluyó arremetidas tales como culpar a ERC de oponerse a la subida del Salario Mínimo Interprofesional a 900€. Por su parte, el partido independentista se defendió argumentando que esta medida podría ponerse en marcha inmediatamente mediante un real decreto, que como se sabe, finalmente se aprobó durante el Consejo de Ministros celebrado en Barcelona. No Hace falta ser muy listo para darse cuenta del fondo de esta disputa. No se lo voy a repetir a ustedes, porque yo sé que muchísimos de ustedes son más listos que yo, por eso no les digo nada. Que cada cual saque sus conclusiones de esta disputa. Mientras aquí estoy, viendo pasar la vida. 

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