jueves, 30 de noviembre de 2017

Se pasan la pelota

Como saben ustedes voy cada mañana a desayunar al bar de mi amigo Pacorro. Se lo pueden tomar como una chulería por mi parte como otra cualquiera. También saben que el dueño del bar compra los periódicos para que sus parroquianos se culturicen o echen la pota, que es casi lo más probable. Pues bien, yo la eche cuando me encontré con esta noticia que me dejó patidefuá pese al escaso margen de sorpresa que a uno le deja ser súbdito español. Ésta decía así: “EL TRIBUNAL SUPREMO ASUME LAS CAUSAS DEL EX GOBIERNO CATALÁN Y LOS JORDIS Y DEJA A LA AUDIENCIA NACIONAL LA INVESTIGACIÓN A TRAPERO”. ¿Por qué?, me pregunte cuando recobre la compostura en la puerta del bar. La culpa de todo esto no la tienen los jueces que sólo aplican la ley a su manera y entendiéndola eso sí cada cual a su aire, sino los gobernantes que hacen esas leyes a su favor para que luego los jueces las interpreten. Pero cabe recordar también, que la justicia en este país deja mucho que desear, por no decir muchíiiiisimo, por lo que luego nos encontramos con cambios de pelota como este caso que nos ocupa, que lo único que va a lograr, es que toda esta panda de golfos salgan de la cárcel sin más, porque lo único que tendrán hacer es como Carmen Forcadell, decirle al juez si guana, si guana y a la calle. Desde el punto de vista jurídico es mejor tener todos estos casos bajo un mismo juzgado y una misma persona, pero los daños colaterales serán grandes porque ya se ven venir. Pero no hay sopa Hispana sin pelo dentro, y la decisión de Llarena que es la juez de la Audiencia Nacional que llevaba este caso, choca con el criterio mostrado por la Fiscalía, que entendió prematuro aglutinar las causas en el alto tribunal, pero tampoco comparte plenamente la postura manifestada por la titular del Juzgado Central de Instrucción número 3, cuyo informe señalaba que las causas penales ya abiertas por el proceso secesionista en Cataluña analizan delitos conexos y por tanto la escisión de la instrucción dificultaría enormemente su investigación. En definitiva, que se pasan el marrón de este caso tan polémico, tan mediático y tan peligroso, en el sentido de que hay otras comunidades autónomas que están al acecho de los resultados para poder ellos meter la patita de la independencia teniendo como ejemplo a Cataluña, pero aprendiendo de los errores que la justicia y el gobierno puedan cometer en este tema para así aprovecharse de ellos al intentar solventar el problema catalán. Es un pastelón de mucho cuidado y un tema bastante peliagudo y no me gustaría estar en la piel del juez del Tribunal Supremo, porque haga lo que haga va a ser criticado y no poco, y la presión a la que estará sometido será bastante grande, porque es muy difícil contentar a todas y cada una de las partes. Pero eso son los daños colaterales de ser juez, que tienes que interpretar la ley que hacen los políticos a los que tienes que juzgar. Buena suerte. Mientras aquí estoy, viendo pasar la vida. 

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