Hasta ese punto

“INTENTA QUEMARSE A LO BONZO EN CÁDIZ PARA IMPEDIR SU DESAHUCIO. LA MUJER SE ROCIÓ EL CUERPO CON GASOLINA EN LAS PUERTAS DE LAS OFICINAS DE LA EMPRESA DE LA VIVIENDA DE CÁDIZ”. Hasta ese punto llega la desesperación de algunas personas. Hasta ese punto. 

Mientras los que han provocado esta ruina, salen de rositas y riéndose de todo el mundo, como siempre pasa en este país de pandereta que tenemos la mala suerte de tener y de mantener, que es lo más chungo y lo más injusto. Hasta ese punto de desesperación llegan algunas personas cuando se ven con 420€ al mes de subsidio (quién lo tenga), o 500€ al mes de sueldo infame, como hay por ahí algunos trabajadores. Claro, lo de siempre, hay que comer, hay que pagar impuestos, hay que pagar luz, agua, gas, hipoteca, etc, etc, y cada final o principio de mes hay que repartir las prioridades con el poco dinero que entra en casa (quién tenga la suerte de ingresar algo). Es entonces cuando las decisiones se vuelven críticas, porque sino comes, te mueres, si comes no puedes pagar otras cosas, si pagas otras cosas no puedes comer, con lo que te mueres, sino pagas impuestos esta administración te embarga parte de lo poco de ingresos que entre a casa, si te embarga ya no puedes comer, si no pagas luz ni agua pues no puedes cocinar ni lavarte, si no te lavas no puedes ir a ningún sitio porque hueles mal, y así hasta el infinito y mucho más podía estar dándoles vueltas al cazo y analizando la situación que tienen algunas personas en este asqueroso país de mierda. 

Pero luego veo a Undargarín, a Blesa, a Bárcenas, a nuestra asquerosa casta política, a los banqueros forrados, y me entran unas ganas de echar la pota impresionantes, por la sencilla razón de que cada día que pasa veo una injusticia más y estas personas junto con algunas más, están cada día más forrados y sus empresas y ellos mismos obtienen más beneficios, pero para ellos. La gente le importa una mierda, es decir, para toda esta gentuza nombrada anteriormente, la diferencia entre una persona y una mierda pinchada en un palo, es simplemente el palo, con lo que ya con eso se lo digo todo. 

Deberíamos ser nosotros los que cogiéramos a todos estos y pegarles fuego, no hacer uso de sus infames sistemas que son los que están arruinando a la clase trabajadora media y baja con el único fin de ellos hacerse más ricos. Deberíamos de ser los ciudadanos que estamos siendo maltratados por estos golfos, los que tuviéramos arrodillados a toda esta panda de golfos, y no al revés. Pero la triste realidad es otra, y es que unos pocos tienen arrodillados y atemorizados a millones con sus bancos, sus leyes, sus aforamientos y sus privilegios. Esa es la cruda realidad, y mientras que eso no cambie, seremos los esclavos de un sistema que han creado unos cuantos para beneficio de esos mismos cuantos. España, con esa palabra se dice todo. Porca miseria. Mientras aquí estoyu, viendo pasar la vida. 

Compártelo: