Una anécdota

Hay políticos o ex políticos que tienen memoria, cosa que muchos no tienen o no quieren tener, ya que esa memoria les puede perjudicar. Aunque hay un personaje que es capaz de quitarle las herraduras a un caballo al galope, y además ser capaz de prevaricar de todo, despotricar de todo y de hasta perder la memoria por tal de mantenerse en el poder, al precio que sea, como sea y aunque tenga que tener respiración asistida para seguir en el poder. Este personaje es ZPedro, actual presidente del gobierno de este desdichado país conocido como España, porque de alguna manera hay que llamarlo. La anécdota la cuenta la que era sociata en un tiempo lejano y cuando las cosas le funcionaban bien a ella. Rosa Díez cuenta sobre ZPedro una anécdota que demuestra su inutilidad y su búsqueda de ascensos con enchufes. Aunque pensándolo bien, la política española estará llena de anécdotas de este tipo, ya que ese oficio, está lleno de inútiles e inútilas. La anécdota que contó Rosa Díez sobre ZPedro en un programa de radio, de esos que tienen hasta contertulios y todo, y que cuentan la actualidad política dependiendo del palo ideológico del que pertenezca la editorial de ese medio de comunicación, no tiene ningún desperdicio y demuestra la inutilidad y caradura de este presidente que nos ha tocado en desgracia, pero que es el más votado también, ojo al detalle Rosa Díez contaba que cuando era eurodiputada por el PSOE en 1999 y también presidenta del grupo de socialistas españoles, le hicieron una propuesta de lo más sospechosa: “De repente vino un diputado, Carlos Westendorp, y me dice que quiere nombrar asesor del grupo socialista a ese chico (un Pedro Sánchez desconocido)”. La contestación de Rosa Díez fue que cada eurodiputado puede contratar como asesor personal a quien quiera. Sin embargo, “Westendorp me contesta que él ya tiene uno, que hablaba para contratarlo para el grupo socialista”. Cada eurodiputado tenía un asesor y el grupo socialista uno a su vez pero para optar a ese puesto había que presentarse a un concurso. Pues bien, o nunca se presentó o no aprobó porque el hecho es que ZPedro no fue contratado. Es decir, lo que pretendían ZPedro y sus padrinos era ser contratado sin pasar por el citado concurso. Cuando se encontró con la negativa a ser enchufado, finalmente no fue contratado. Es una pena que Díez no supiera si se presentó al concurso y no aprobó o si, simplemente, no se presentó al concurso. Lo que está claro y es más que evidente por su más que demostrada falta de luces, es que ZPedro sin padrinos no habría llegado nunca a nada. Habría que preguntarse qué clase de padrinos son los que se gasta este tipo para haber llegado a dónde ha llegado. Sabiendo quién fue el primer personaje con el que ZPedro tuvo una entrevista secreta en la Moncloa, nos lo podemos imaginar. Ni más, ni menos que el gran jefe que lo maneja todo, también a la marioneta que preside ahora el gobierno. España, año 2020. Mientras aquí estoy, viendo pasar la vida. 

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