miércoles, 15 de julio de 2020

Se queda en tierra

Tengo una bicicleta de carretera. Cada mes y algo, tengo que llevarla al taller para que le cambien la cadena, le reaprieten la tornillería y le hagan algunas cosillas más. No es que la bici sea de mala calidad, es porque le doy uso y cuando eso se hace, pues hay que llevarla al taller. Con los aviones pasa más o menos lo mismo, pero a lo grande. Y eso es lo que le ha pasado al avión de un personaje español que hace un uso intensivo de ese aparato de transporte que el estado le pone a su disposición, para hacer viajes, que deberían de ser oficiales, pero que este personaje los hace incluso para viajes privados con un medio de transporte público, o sea mire usted, que pagamos entre todos. Recuerden ustedes que viven en España, un matiz importante a la hora de entender varias cosas. Día 10 de Julio del año de Nuestro Señor 2020. Fin de campaña electoral, o le que sea que se llame ese mentidero quincenal. Las elecciones se cerraban en Galicia y en el País Vasco. Nuestro querido personaje, quería ir a Galicia a hacer campaña, pero le surgió un imprevisto, y es que al medio de transporte que iba a utilizar, le surgió una avería, con lo cual este personaje no pudo ir. Me remito al párrafo primero para entender la situación. Falconeti se quedó compuesto y sin novio. Pero personalmente me alegré de esa avería, ya que nos ahorró a los ciudadanos una cantidad de dinero enorme, ya no por el simple hecho de que el avión tiene un gasto increíble, sino por el desplazamiento de los vehículos para luego moverse por allí y también por el ahorro del dinero de tener que pagar a los guardaespaldas las dietas. Fíjense ustedes la cantidad de dinero que nos hemos ahorrado. De todas formas, el mitin que hubiese dado allí el personaje de quién les hablo, es muy simplón y nada nuevo, ya que la culpa de todo el del PP y de los fascistas de la ultraderecha española, que con su PSOE todo iría mejor, que sin ellos España no furula, ni una mención a los problemas que tiene el chepas, su socio de gobierno, y pedir el voto para su candidato sociata en Galicia. Punto y pelota. Campaña cerrada, dineral tirado a la basura en medios técnicos y humanos y ya está. Por eso les vuelvo a repetir que me alegro mucho de la avería de ese avión. Pero seguro que falconeti, que también se le conoce así en el mundillo aeronáutico a este personaje, pues daría pataditas al suelo todo cabreado ya que su gran ilusión era disfrutar otra vez de volar, en medio de las nubes, bebiendo copitas de J&B o algún que otro licor alcohólico (porque el falcon lleva de todo eso, tiren de hemeroteca), mientras el personaje va pensando en lo bueno que soy, en la maravilloso que soy, en lo estupendo que soy y que suerte tiene España de tenerme como presidente. Sí, queridos blogueros, este personaje es ZPedro, conocido así en el mundillo político. Pero esta vez, se ha quedado en tierra, se ha quedado sin poder hacer lo que más le gusta con el dinero de los españoles, que es volar en el falcon. Así es. España, año 2020. Mientras aquí estoy, viendo pasar la vida. 

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