Pa mearse

Si no lo leo no lo creo. Si a alguien me lo cuenta me parto el culo delante de sus morros, pero no, es cierto. O eso por lo menos es lo que pone el periódico en el cual leí esta noticia que me dejó patidefuá, pese al escaso margen de sorpresa que a uno le deja ser súbdito español. La noticia decía así: “UN ALCALDE DEL PSOE VIAJA DESDE ALMERIA A CATALUÑA EN COCHE OFICIAL”. Toma del frasco, Carrasco. Pero les cuento. 

En Bacares, un pequeño pueblo de unos 260 habitantes del Valle del Almanzora almeriense, es donde vive este alcalde conocido como José Segura, porque de alguna manera hay que llamarlo, que ha protagonizado esta noticia, y por la cual está envuelto en la polémica por el viaje de cinco días a Barcelona que junto a su mujer y su hijo ha realizado en el coche oficial del Ayuntamiento, una furgoneta Peugeot Partner. 

Aunque el viaje fue a finales del pasado noviembre, los hechos han sido denunciados ahora por el grupo popular, después de que pidiera explicaciones al alcalde sobre los motivos por los que se había trasladado a Cataluña usando el coche oficial y con sus familiares, y de haber obtenido en una respuesta que considera poco creíble. 

Ricardo Pascual, portavoz municipal del PP, asegura que el alcalde viajó el 25 de noviembre a Barcelona para asistir al entierro de una prima de su mujer, e incluso dice tener testigos que le vieron, y hasta le saludaron, durante el sepelio. También afirma que familiares del alcalde reconocieron esos días en Bacares que Segura había ido a Barcelona al entierro de la familiar de su mujer. Sin embargo, el alcalde ha desmentido rotundamente este extremo, (como siempre hacen cuando son pillados) hasta el punto de que afirma que en esas fechas no murió ningún familiar. 

La versión del alcalde es bien distinta, como se pueden ustedes imaginar, y explica que había viajado por dos razones a Barcelona: en primer lugar para visitar a propietarios de tres viviendas del pueblo que residen en Cataluña y resolver diferentes cuestiones para su cesión al municipio. Y en segundo lugar, para asistir a un acto contra la violencia de género que se celebraba en el municipio barcelonés de Polinyà, e invitar a su alcalde a las fiestas del Romero de 2017, que precisamente se celebran en este mes de febrero. Pero el Ayuntamiento de este pueblo catalán dice no tener ninguna invitación oficial ni tampoco una visita del alcalde de Bacares al municipio. 

Los populares están convencidos de que el motivo del viaje fue particular, y no oficial, por lo que reprochan al alcalde que los gastos de combustible hayan tenido que ser pagados por un pueblo que atraviesa una complicada situación económica, con 850.000€ de presupuesto y una deuda de 250.000€. Y consideran que otra prueba de ello es el hecho de que el alcalde no haya pasado dietas por el viaje, algo que sí suele hacer, dicen, cuando acude a Almería para resolver trámites municipales. Pa mearse. Mientras aquí estoy, viendo pasar la vida.

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