Criticando a los suyos

Echeniquelicuatre no deja de sorprenderme. No paga a la Seguridad Social por su asistenta, vive en el Barrio de Salamanca al cual critica porque sus vecinos protestan con caceroladas y con palos de golf para que ZPedro dimita, y así una tras otra. Pero resulta, que el pijomunista más mezquino, tiene un padre que es jugador de golf al que insulta. Eso sí, como buen niño pijo reniega de sus padres, aunque intente vivir como ellos. Y estos días el mezquino y bocachancla de Pablo Echenique se ha dedicado a criticar a las personas que se manifiestan cada tarde a eso de las 21H en la madrileña calle de Núñez de Balboa, del barrio de Salamanca, donde él mismo vive. Y a estas personas pablo Echenique las califica de cayetanos, ricos, pijos, y los califica de jugadores de golf. Una manera muy original de insultar a alguien. Pero es que Pablo Echenique, además de insultar a sus vecinos de barrio también lo hace con su padre, porque según ha publicado la página web Golfclick (no duden en mirarla y en disfrutarla), su progenitor juega al golf. En un artículo que puedes leer sin cortapisas, y en el que dicen: «Soy socio de un club de golf, de esos que te revientan. Igual que tu padre Enrique Fermín Echenique (supongo que te sonará el nombre), para más señas es handicap 24,9 y socio de La Peñaza (Zaragoza) y habitual de todos los torneos del club y sí, es tu padre, un pijo más, un enganchado al deporte que más valores es capaz de transmitir». Sí, el padre del portavoz de Podemos es jugador de golf, y ejerce de ello. Y Pablo Echenique reniega de su padre, como buen pijomunista, y lo insulta. Y si viviéramos en la dictadura que pretende Podemos instaurar en nuestro país seguramente el propio Pablo Echenique denunciaría a su padre, por pijo. En el fondo lo que le gustaría ser a él, porque todos estos sin vergüenzas de Podemos en el fondo son unos amargados envidiosos de los que viven mejor que ellos y, sobre todo, tienen más valores y moral que su calaña. En fin, hoy ya me he cansado de ver, oír y de escribir sobre estos mediocres pijocomunistas que sólo saben liarla sin pundonor ningunos. Ya sabéis el dicho: hacer lo que yo diga, pero no hagáis lo que yo haga. Porca miseria. España, año 2020. Mientras aquí estoy, viendo pasar la vida. 

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