domingo, 24 de noviembre de 2013

Engañando al fisco

Estos sindicalistas (no se rían por dios, en España todavía existen estos parásitos sociales aunque ustedes no los vean ni por error televisivo) no tienen hartura. No encuentran el fin a su mezquindad y a su ambición. Eso sí, siempre con el dinero de otros, no con el que ellos ganan con el sudor de su frente, entre otras razones porque para sudar en el trabajo tienes que trabajar y estos sindicalistas no saben lo que es eso desde hace más de 30 años, o lo que es lo mismo, desde que Franco estiró la pata. La última de estos golfetes es la siguiente: “UGT, OBLIGÓ A MODIFICAR FACTURAS PARA SUBVENCIONARSE SUS REVISTAS INTERNAS Y CCOO PAGÓ SOBRESUELDOS CON LOS FONDOS PARA DESEMPLEADOS”. Lo de la UGT tiene delito, pero el que abdicó para hacer esas facturas falsas tiene más delito aún, porque cometer ese engaño al fisco tiene su aquel. Lo de CCOO es más llevadero, ya que muchos partidos políticos, por no decir casi todos, lo hacen y se ha convertido en una práctica habitual dentro del panorama político y sindical español. Lo que yo me pregunto es como UGT obligó a esa empresa o a esa institución a modificar esas facturas. Se puede obligar de muchas formas, con amenazas, con quitarle el chupe también a esa empresa sino pasa por el aro, a denunciarla por hacer fraude, etc, etc, ¿cómo lo hizo?. 
Cada día que pasa lo flipo más con estos sindicalistas. No tienen bastante con robar, con chupar, con defraudar, con engañar, con vivir como dioses del Olimpo sino que además someten a su voluntad a otras empresas para ellos llenar sus carteras y así asegurarse un futuro mejor. ¿Se podrá ser más sinvergüenza?, pues parece que sí, porque cada día que pasa sorprende más la capacidad de estos sindicalistas de tres al cuarto que tenemos a la hora de forrarse con un dinero que no es suyo y que malgastan en su beneficio sin ningún pudor. Parecen más políticos que sindicalistas. Pero estamos en España y eso dice mucho de la clase de pájaros que son ciertas personas que se escudan detrás de unas siglas que antaño tuvieron mucho peso, pero que ahora pesan del montón de mierda que tienen encima gracias en parte a dirigentes avariciosos y sólo han mirado por sus intereses personales, es decir, buena vida mientras están en el sindicato, y asegurarse un futuro mejor cuando dejen el sindicato. Tenemos un claro ejemplo, el señor Fidalgo que ha pasado de ser un sindicalista activo, ha presentar las memorias de Aznar, su más acérrimo enemigo, supuestamente. ¿Qué esperamos de toda esta morralla?, yo personalmente hace tiempo que no espero nada de esto chupópteros sindicatos, con lo que hago como, yo me lo guiso y yo me lo como, porque como caigas en manos de esta pandilla de amiguetes estafadores y ladrones apañao voy. ¿Cómo han llegado a esta situación?¿por qué?. Yo la verdad no llego a entenderlo. Personalmente ya no hacen ninguna labor a nadie, salvo a ellos mismos. Lo malo es que tengo que seguir manteniéndolos de mis impuestos, y eso me jode un montón. Entonces, ¿sindicatos para qué?.Mientras aquí estoy, viendo pasar la vida. 

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