El plan B

Todos ustedes conocen a Gabriel Rufián, ese parlamentario catalán indepen de ERC que odia todo lo español, excepto el sueldo que cobra en el parlamento español. Pero seguramente también lo reconocerán por sus gilipolleces variadas y sus tonterías cada vez que le toca hablar en el parlamento, ya que suele ir acompañado con objetos un tanto peculiares como son unas esposas que se compran en los sex shop o con una impresora. Pero seguramente también lo conocerán por las barbaridades que suelta por esa linda boquita que dios le ha dado, porque muchas veces parece que no se entera de la situación o no quiere enterarse o simplemente es un analfabeto político que por tal de ser noticia y tener su momento de gloria en los medios de comunicación, actúa así. La última tontería de este Rufián, ha sido decir que Oriol Junqueras es el plan B si Puigdemont no puede volver. Como ustedes se pueden imaginar, el plan A era el presidente legítimo de Cataluña, Carles Puigdemont. Pero el objetivo de ambos planes, es restituir a todo el gobierno legítimo de Cataluña, volver al status quo previo al golpe de Estado del club del 155, ha dicho este Rufián tan corto de entendederas, como se puede apreciar. Lo raro es que no haya un plan C, pero si lo hubiera seguramente sería el esposar a todo el club del 155 y ponerse él y todos los suyos al frente de Cataluña. Pero en fin, con dos planes tenemos bastante para partirnos el culo. Lo que Rufián no entiende, o no sabe, o no quiere admitir o simplemente se hace el loco para así poder salir a los medios de comunicación y soltar gilipolleces, es que tanto Puigdemoooooort, jefe del plan A, y Oriol Junqueras, jefe del plan B, son unos rebeldes, según las resoluciones judiciales, con los cual el primero está fugado, con lo que es un prófugo de la justicia, y el segundo a día de hoy sigue en prisión preventiva por esos delitos tan graves. Si estas cosas las extrapolamos al ámbito de la gente que tiene los pies en la tierra, sería como intentar apretar un tornillo por un trabajador cualificado por videoconferencia, o cómo intentar solucionar una avería eléctrica desde la cárcel. Algo impensable. Pero para el amiguete Rufián, si las personas de los dos casos anteriores fueran indepen, entonces sí que se podría solucionar, dada la forma de pensar que tiene el amiguete, y sus cortas entendederas. Es lo que nos ha tocado tener y mantener con nuestros impuestos, gentuza de este calibre que sólo se aplica la ley cuando a ellos les interesa y no cuando realmente hace falta, que es cuando se cometen delitos y como es el caso tanto del tipo del plan A como del tipo del plan B. Pero los analfabetos abundan y ahí están dando la lata y la matraca con sus cosas que sólo ven ellos en su mundo particular muy alejado de la realidad que nos rodea y está implacablemente sacudiendo a los ciudadanos. Por lo menos nos reímos con sus ocurrencias, que ya es un desahogo a tanto problema. Vaya tela. Mientras aquí estoy, viendo pasar la vida. 

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