La invasión de Cataluña

Hay dos tipos de CIU de cuyo nombre no quiero acordarme. Uno es el señor Trias que es el alcalde de Barcelona, y además tiene que ser un tipo con complejos. La última de este personaje es que se niega a abanderar el buque Juan Carlos I de la armada española. ¿Por qué? Se dirán ustedes, pues porque no quiere ser cómplice de la invasión española a la que se encuentra sometida la tierra catalana por el ejército español. Este tipo no va a ser menos que ese eurodiputado de CIU y de nombre Ramón (el segundo tipo de cuyo nombre no quiero acordarme) que envío una carta al consejo europeo quejándose de que el ejército del aire estaba invadiendo el territorio catalán. Es decir, que unas maniobras del ejército lo toma este tipo como una invasión. Lo que yo no se es como este tiparraco que gana 10.000€ al mes, pueda decir esa gilipollez tan inmensa. Los que vivan cerca de la base aérea de San Javier, o de la base de Cuatro Vientos, o de la base de Armilla, esos como están, ¿invadidos y conquistados?. Debería de decírnoslo este tipo conocido como Ramón, que por cierto tiene un nombre más español que Cataluña. Estos tipos que piensan así, es que no tienen nada mejor que hacer, y de ahí que piensen en gilipolleces de este calibre, porque si realmente se ocuparan de desempeñar su cargo en tan sólo un 10%, ya no digo al 100%, sino al porcentaje anteriormente mencionado, no tendrían tiempo material para dedicarse a perder en tiempo en cuestiones que no les interesa a nadie y que por supuesto no soluciona los problemas de los miles de catalanes en paro y de los miles que no tienen nada que llevarse a la boca. Pero claro, es más fácil dedicarse a decir gilipolleces que a trabajar, porque mientras que les paguen su jornal, no se preocupen de solucionar nada, pues ellos más felices que unas castañuelas en una feria. La culpa a fin de cuentas no la tienen ellos, la tiene quien permite que esas cosas sucedan, la tiene quien permite que gente así se preocupe más de una cosas inalcanzable que de solucionar problemas. Pero eso es lo que tiene ser político en este asqueroso país, que nadie te pide objetivos ni mucho menos resultados durante la gestión del puesto, porque si así fuera todos los políticos estarían tocando la guitarra en la boca del metro para poder subsistir. Por eso para ser político se dan de hostias, y déjense ustedes de pamplinas de esas de por ayudar a los demás, porque se es un patriótico, etcétera. La verdadera cuestión es que en ningún sitio te pagan tanto, tan puntual y tan bien por hacer el vago y decir gilipolleces. Y estos dos tipos catalanes son un claro ejemplo de esta teoría, aparte del parlamento que a las 9H, que es el inicio de la sesión, sólo había 25 diputados en el hemiciclo. ¿Temprano?, no, simplemente políticos españoles. He ahí otra demostración de la teoría anterior y de que los españoles y sus problemas les importamos una mierda. Qué asco dan por dios. Porca miseria. Mientras aquí estoy, viendo pasar la vida. 

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